Por Raúl Gorrín.- De nada sirve que nuestras páginas web
tengan mucho tráfico si no obtenemos un beneficio de ello, si este andar y
recorrer nuestros contenidos no se traduce en resultados concretos, por
ejemplo, potenciales clientes para la organización. Convertir los lectores en compradores,
es el objetivo principal.
En primer lugar hay que conseguir tráfico SEO de calidad.
Para ello los contenidos tienen que responder a las necesidades de los
potenciales clientes. Esto determinará el tipo de información que vamos a
suministrar.
Son tres las fases de SEO en el proceso de compra. La
primera de dichas fases es la de descubrimiento que se inicia cuando un usuario
identifica una necesidad. Entonces, para este momento el contenido a
desarrollar en las páginas debe ser educativo. Es preciso ayudar a este usuario
y suministrarle toda la información que sea posible.
Así al identificar la necesidad los post de contenido
deberán responder a las inquietudes del usuario, hay que darle respuestas.
Luego tenemos la fase SEO de consideración en la cual el
potencial cliente ya conoce que existe una solución a la necesidad que
presenta.
Ahora los contenidos deben ser más específicos que en la
fase anterior, pues el usuario quiere profundizar en las soluciones y tiene que
tener nuestras publicaciones en cuenta como parte de sus estrategias.
La tercera fase SEO es la de decisión en la que las keywords de long tail que son las que tienen
un volumen de búsquedas bajo pero que aun así captan tráfico desde buscadores,
deben usarse.
En esta etapa ya el potencial cliente sabe cuál es la
solución a su necesidad y sus búsquedas son más concretas.
Los contenidos ahora están dirigidos a que el usuario tome
una decisión, por lo que ahora hay que usar correos electrónicos que permitan
la conversión del usuario en cliente.
Se trata de generar contenido de calidad que genere tráfico
de verdaderos potenciales clientes.
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