Por Raúl Gorrín.- Estudios y sondeos
revelan que para la gente cada vez es más importante la protección de sus datos
personales a la hora de realizar sus transacciones bancarias y financieras.
Y es que nadie quiere ponerse en riesgo y
exige seguridad al momento de proporcionar sus datos financieros. Sin embargo,
a pesar de la conciencia que tienen de ello, no quieren complicarse con
procesos engorrosos. Piensan que la protección de datos se equipara a enrevesados
procesos de claves, contraseñas, encriptación, que temen no poder dominar.
Es necesario alinear el deseo de seguridad
con la práctica, de manera que llevar a cabo una simple transferencia se
realice con seguridad y sin complicaciones.
En la mayoría de las personas prevalecen
los comportamientos peligrosos que ponen en riesgo su información financiera,
por ejemplo, persisten en mantener sus viejas claves y no acogen la aconsejable
costumbre de cambiarlas trimestralmente. Afortunadamente, en lo que sí han
mejorado es que ya menos personas hacen sus operaciones en lugares públicos.
Igualmente cada vez el pago electrónico
gana en simpatizantes y el porcentaje de personas que están dispuestos a probar
nuevas tecnologías crece día con día.
Es por esto que queremos darles algunos consejos
para que tome en cuenta a la hora de realizar sus transacciones y mantenga a
salvo su información financiera personal.
En primer lugar ponga atención al asunto de
las contraseñas que no es cualquier cosa. Cree contraseñas con alto grado de
complejidad, usando para ello letras mayúsculas y minúsculas, números y
símbolos. Cámbiela por lo menos una vez al año, aunque lo ideal es hacerlo
trimestralmente.
No use la misma clave para todas sus
transacciones y entidades bancarias y financieras.
Resguárdese usando una cuenta de correo
electrónico que no sea de uso frecuente y que le permita la recuperación de sus
contraseñas. Muy pronto los medios biométricos con huellas dactilares y
reconocimiento facial le permitirán imprimirle más seguridad a sus compras.
No se arriesgue, compre en establecimientos
reconocidos y páginas web de confianza cuando de comercio electrónico se trate.
Las tarjetas con chip son mucho más seguras
y tienen menos posibilidades de ser usadas en operaciones fraudulentas.
Revise con regularidad sus estados de
cuenta para chequear sus operaciones. En caso de encontrar compras no
autorizadas comuníquese de inmediato con su banco.
No corra riesgos y no abra links o archivos
adjuntos de correo electrónicos de fuentes desconocidas. Ninguna institución
seria le solicitará datos personales a
través de llamadas telefónicas, mensajes de correo o de texto, o redes
sociales.
Para sus viajes las tarjetas de crédito son
lo más seguro. Así evitará traslados con grades sumas en efectivo. De ser
posible particípele a su banco que saldrá de viaje y hará uso de instrumento de
crédito fuera de su localidad o país.
Visita también:
El emprendimiento humanista
Los nuevos emprendedores
Referencia
empresarial
Conciencia
social
Productivity
and Efficiency
The
Entrepreneur-humanist
SÍGUEME..
Twitter
Facebook
Linkedin
Google+
No hay comentarios:
Publicar un comentario